jueves, 16 de julio de 2009

Productos audiovisuales (II)

www.microresearch.es

La televisión:

La televisión tiene que ver con la parte tecnológica de la que hablábamos antes, sin embargo la aparición de nuevas tecnologías supone que al adaptarse a ella los creativos, guionistas y directores fundamentalmente, cambian sus dinámicas narrativas, con lo que un avance tecnológico supone un cambio artístico.

La televisión absorbe todo lo que estaba haciéndose en cine hasta ese momento, de tal manera que películas de ficción y documentales pasan a convertirse en productos de televisión, sin embargo ese cambio en las dinámicas narrativas que comentábamos anteriormente suponen la aparición de nuevos productos para la televisión, como por ejemplo los seriales, producto de otros formatos que se habían desarrollado como genero menor en el cine, pero también como un genero importante en la radio; la televisión por lo tanto se nutre de un aporte narrativo del cine pero al mismo tiempo es un medio de comunicación lo que diversifica la cantidad de productos que puede ofrecer.

Estos nuevos productos que tienen que ver más con el periodismo que con el cine, son importados de la radio, espacios informativos, debates, noticias y fundamentalmente retransmisiones en directo. La televisión como su propio nombre indica supone una visión a distancia y por lo tanto tiene la capacidad de poner al alcance de una gran cantidad de publico, eventos de su interés a distancia e instantáneamente como si estuvieran en el lugar donde se desarrollan lo hechos, entre estos eventos de interés general están las noticias de actualidad y espectáculos, fundamentalmente deportivos, que se convierten en productos propiamente televisivos. Se desarrolla para este tipo de productos una tecnología para su rodaje y retransmisión.

La televisión por su capacidad de llegar a grandes audiencias supone un importante mercado, si el cine era un producto de lujo con gran repercusión pero una relativa rentabilidad, la televisión es un producto con un coste más barato y con una repercusión mucho más alta; en la televisión los tiempos se reducen, hay que trabajar mucho más contra reloj que en el cine, y por lo tanto no hay tiempo para desarrollar dinámicas narrativas o tecnológicas, la televisión absorbe todo lo que otros medios, cine, radio, prensa escrita, etc… le ofrecen. Si el cine es la alta costura, la televisión es el “pret a porter” y como tal es un producto mucho más popular y accesible, lo que lo hace mucho más interesante para acciones de marketing, si en el cine el retorno de las inversiones viene por el precio que pagan en taquilla los usuarios, la televisión se ha venido financiando gracias a la publicidad.

Han aparecido en los últimos años una serie de nuevos actores que ponen a la televisión a la cabeza del mercado audiovisual, por una parte la aparición de plataformas digitales y de televisión por cable que favorecen la aparición de canales temáticos frente a las televisiones generalistas tradicionales, esto ha fomentado la creación de programas de televisión muy diversos, encaminados fundamentalmente al entretenimiento pero con formatos fuera de lo tradicional, si bien podrían encuadrarse dentro del genero documental, en algunos casos lo trascienden para convertirse en espectáculo, es el caso de “Cazadores de mitos”, que podríamos considerar un documental de entretenimiento, mientras que en otros se ciñen al formato documental pero explotan una vertiente concreta para cubrir toda una programación diaria, este sería el caso de “Canal de historia” con una programación compuesta casi en su totalidad de documentales temáticos sobre historia. Por otra la aparición de la TDT, televisión digital terrestre, que ha hecho proliferar una serie de emisoras de televisión de bajo presupuesto que necesitan de productos audiovisuales para cubrir sus programaciones.

Existe por ultimo un género que ha estado presente en la televisión desde el principio y que he dejado para el final ya que nos cuenta la evolución de este medio a lo largo de su historia, se trata de los programas concurso. Estos empezaron siendo programas culturales donde los concursantes acudían a evaluar sus conocimientos de cultura general o de un determinado tema a cambio de una remuneración económica, la televisión tanto en España como en el resto del mundo esta llena de ejemplos como “Quiz Show”, “Un millón para el mejor” etc., sin embargo este tipo de programas evolucionaron hacia una combinación de cultura y destreza física para terminar en subastas de premios el ejemplo más claro donde se combinaban las tres partes era el mítico “Un, dos, tres, responda otra vez” de Chicho Ibáñez Serrador.

Este tipo de programas se podía dividir en los clásicos programas de evaluación de conocimientos, “Quiere ser millonario” programas de destreza física tan famosos en la televisión japonesa y programas de subasta donde cabe destacar “El precio justo”.

Sin embargo en los últimos años ha aparecido un nuevo tipo de concurso que podríamos llamar concurso de convivencia, donde con la excusa del experimento sociológico, se trata de ver la vida real de unos concursantes encerrados en un recinto, donde conviven y compiten por la recompensa económica, el paradigma y pionero de este tipo de programas es “Gran Hermano” de la productora holandesa Endemol.

Para terminar hablare de un tipo de concurso de bajo presupuesto que ya existía en la radio, se trata de los concursos de llamadas telefónicas, lo que en principio era un concurso se ha convertido con la proliferación de la telefonía en una especie de gancho donde las verdaderas ganancias no están en la posible publicidad que el programa aporta a la cadena, sino en el porcentaje que estas se llevan del precio de las llamadas telefónicas.

miércoles, 15 de julio de 2009

Productos audiovisuales

www.microresearch.es


El cine:


El cine es un producto audiovisual de lujo, en el se ponen en practica técnicas que en el futuro pasaran a productos menos elaborados. El cine es una inversión básicamente de tiempo, se dedica tiempo a producir una película para impactar en su estreno, si bien el cine es un puro espectáculo audiovisual, por las dimensiones de la pantalla en la que se proyecta y la tecnología que en el se pone en practica, no necesariamente es la tecnología el elemento principal, factores creativos, al margen de los tecnológicos, como pueden ser los actores, guionistas y directores son muy importantes para el éxito de un proyecto cinematográfico.

Los productos audiovisuales tienen una escasa variedad y la aparición de la televisión absorbió parte de estos productos en detrimento del cine, básicamente se centran en películas de ficción producto de la imaginación de un guionista y películas documentales que pretenden reflejar la realidad, social o natural, sesgado por la opinión del realizador.

Básicamente el cine hoy en día consiste en el desarrollo de películas de ficción, si bien en los últimos años un producto que parecía relevado a la televisión ha vuelto a tener presencia en la gran pantalla, se trata de los documentales, a través de películas como “Bowling for colombine”, “Farenheit 9/11” o “Super size me”, sin embargo creo que son producto que eventualmente han tenido popularidad, pero el genero documental no tendrá continuidad. Existe una variante de documentales que se basan en su espectacularidad al ser proyectadas en “cines” con características técnicas especiales como puede ser el IMAX y que siguen conservando el interés del espectador, sin embargo los costes de producción hacen que este tipo de documentales sean escasos, con lo que los espectadores no acuden sistemáticamente a este tipo de proyecciones.

Con el éxito de este tipo de documentales este genero se ha reactivado, apareciendo películas que bajo un supuesto formato documental pretenden hacer una critica social, un ejemplo sería el cómico Sacha Byron Cohen, con películas como “Borat” o su ultima producción “Bruno”, sin embargo este tipo de productos se apartan del documental clásico como “El hombre de Aran” de Flaherty o “El hombre cámara” de Vertov, donde si se pretendía recoger la vida real; sin embargo los “realitis” que han aparecido en los últimos años como producto televisivo, “Gran Hermano” (si George Orwell levantara la cabeza…) han desnaturalizado la visión que el audiovisual en general recogía de la vida real, natural, social o cultural, desvirtuando el formato documental.

Nos queda por tanto como único producto las producciones de ficción, en este caso también existe esa dicotomía entre la tecnología y el elemento artístico, pero con un pequeño decante a favor del elemento artístico y es que incluso las películas con mayor aporte tecnológico, necesitan por lo menos de un guión, mientras que en las películas basadas en el elemento artístico prescinden totalmente de la tecnología, si dejamos al margen la propia recogida de imágenes. Podemos definir estas dos tendencias bajo el criterio de cine espectáculo la tecnológica y el cine como arte la que opta por la vertiente artística. En los años 50 del siglo pasado ya hubo una situación similar, la aparición de la televisión hizo que el cine tuviera que retener a su público, bajo el criterio tecnológico lo hizo el cine americano, con el cinemascope y la película de 70 mm., mientras el cine europeo opto por la vertiente artística a través de guiones innovadores y una visión particular de los directores, a menudo responsables de los guiones, de aquí surgió la Nouvelle vague” o Nueva ola.